Los días 3 y 4 de octubre próximos se celebrarán las 7ª Jornadas de Teatro de Frontera.
Hace ahora nueve años, inició su andadura una empresa que por aquel entonces -corría el año 2005- se veía difícil y lejana: se pretendía preservar el texto de los Episodios Caudetanos y de El Lucero de Caudete, y la representación de los primeros, en tanto que eran testimonio vivo y fiel de aquel teatro del XVIII que ponía en escena piezas en las que se entremezclaban lo religioso y lo profano. Para conseguirlo se ofrecía un doble camino: por un lado, la senda de la investigación y el estudio, que debía resultar en sendas ediciones críticas de dichas obras; por otro lado, la institucional, sustanciada en la solicitud de la declaración de los Episodios Caudetanos como Bien de Interés Cultural. En el transcurso de estos años, otras iniciativas han ido sumándose a ese empeño común. Iniciativas como estas Jornadas de Teatro de Frontera, que en el presente alcanzan su séptima edición.
El que cada mes de septiembre se ofrece en Caudete a los ojos de los espectadores es un teatro fronterizo, cuya amplia mirada contempla y reflexiona acerca de la diversidad y la diferencia (el bandido frente a la autoridad, el moro frente al cristiano…), que no condena, sino que se esfuerza por entender la complejidad, y ello, paradójicamente, en una época en la que la religión era, en gran medida, un poderoso instrumento de cohesión (y por tanto, de presión) social. Un teatro, en suma, destinado a convertirse en uno de los aparatos que hicieron posible la forja de una identidad comunitaria. Un ejemplo de ello lo tenemos en la originaria Comedia Poética o Autos de Nuestra Señora de Gracia, representación festiva que conmemoraba el enterramiento de las imágenes de la Virgen de Gracia y de San Blas durante la invasión musulmana y, pasados los siglos, su posterior descubrimiento de forma milagrosa.
Los Episodios Caudetanos, inspirados en esta Comedia y en El Lucero de Caudete, incorporan a la trama la reconquista cristiana y la expulsión de los moriscos. Esta tradición dramática se convirtió para Caudete en un símbolo de identidad comunitaria que, por su carácter religioso, adquiriría con el paso de los años un valor casi ritual. En la actualidad, son muchos los elementos que hacen de los Episodios una pieza excepcional, que mantiene, a pesar de los siglos transcurridos, los preceptos del teatro barroco.
En estas Jornadas se pretende, tomando como punto de partida las obras caudetanas, disertar y debatir en torno a los rasgos específicos de este tipo de teatro, con el objetivo de contribuir a un mejor conocimiento del teatro barroco festivo y religioso, en general, y de nuestra propia tradición dramática, recientemente distinguida por la Junta de Comunidades de Castilla – La Mancha con su reconocimiento como Bien de Interés Cultural, el primero de carácter intangible en nuestra región.